Una anaconda amarilla (Eunectes notaeus) apareció en el estacionamiento de un edificio y causó asombro de los residentes. La boa fue encontrada en el sector de aparcamiento de un inmueble ubicado por Tucumán al 1089, ayer alrededor de las 11. Al encontrarse con semejante ejemplar llamaron al 911 que alertó a los bomberos y procedieron al rescate. De su liberación se encargó el Centro de Conservación Aguará.
El ejemplar de gran tamaño se arrastraba sigilosamente por el suelo del garaje de un edificio ubicado por calle Tucumán al 1089 en pleno centro de la ciudad de Corrientes. Uno de los vecinos se llevó un gran susto al encontrarse con el reptil y no dudó en llamar al 911.
Los bomberos voluntarios del cuartel 397 acudieron de manera inmediata y a través del uso de las herramientas para raptar a la especie acuática y lograron colocarla en un balde provisoriamente.
Al cabo de unos minutos llegaron los rescatistas de ofidios del Centro de Conservación Aguará quienes constataron que la serpiente no presentaba ninguna herida y la trasladaron a la reserva de Laguna Brava para que habite en un espacio natural.
La boa curiyú es el más grande de los boídeos argentinos, llega a medir 4 metros, y su peso alcanza los 30 kilogramos. Cuando se encuentra un ejemplar de este tipo, los expertos recomiendan que mantengan distancia y comunicarse con el Cepsan (Centro de Producción de Suero Antiofídico) al 379-44786256, al 911 o al 0800 de la Municipalidad de Corrientes.
(VT)