“Patitas Solidarias”, es un organización no gubernamental que sirve de refugio para animales en Santo Tomé. Hace varios años trabajan y anhelan contar con un lugar adecuado.
Sobre esto, la titular de la citada ONG, Claudia Acuña contó a este diario que Patitas Solidaria nació nueve años atrás por iniciativa de algunos pobladores que estaban preocupados por el estado de abandono de los perros callejeros. “Me invitaron para participar y acepté”, indicó, tras lo cual explicó que “comenzamos dando asistencia ambulatoria, tratando de ubicar cachorros y medicando los mismos en la vía publica .Pero con el tiempo la necesidad nos mostró que era más grande, así que comenzamos a ir al canil municipal y ubicábamos ahí los animales que se sacaban de la calle, pero como ese canil es muy chico, comenzamos a traerlos donde está actualmente es mi domicilio. Y todavía seguimos luchando por conseguir un lugar fuera del radio urbano”.
En este marco, recordó que “se solicitó al Concejo Deliberante hace cinco años un terreno para trabajar como refugio, para hacerlo inclusive en conjunto con el municipio. En su momento el cuerpo deliberativo nos dió un terreno que tenía 100 metros por 50. Pero nos dio en comodato por dos años”.
Consultada sobre si llegaron a utilizarlo, Acuña dijo que “se puso un cartel de Patitas Solidarias, unos postes y se hizo un cerco perimetral, pero no teníamos acceso al agua y la luz. En su momento el municipio nos dijo que tampoco tenía ni personal, ni elementos para ayudarnos a construir por lo menos unas casas para hacer de refugio y de depósito para los alimentos de los animales”.
Por ello, agregó que “nos manejamos con nuestros recursos, pero nos encontramos después que nos habían arrancado los postes, los carteles, había entrado gente a usurpar el terreno, se hizo la denuncia, nos presentamos al Concejo y el municipio nos respondió que no podían ayudarnos a desalojar esas personas. Yo decidí que desistiéramos del comodato. Ese fue el último contacto que tuvimos con el municipio”. No obstante, destacó que con la Dirección de Bromatología trabajamos bien y con respeto. Mientras que con el Gobierno Provincial, lograron conseguir personería jurídica y “luego nos han brindado un subsidio por única vez de $10 mil para comprar alimentos”.
“Ahora yo he puesto en venta parte de mi terreno, para ver si con ese dinero comprar una hectárea fuera del radio urbano. Lo ideal sería un terreno de una hectárea con acceso de agua y luz, el resto lo vamos viendo”, remarcó la titular de Patitas Solidarias, quien además agradeció el apoyo de la gente para poder reunir los 40 kilos diarios de alimento que necesitan para los animales.
Además de las donaciones, indicó que hacen venta de garaje de ropas para recaudar fondos. (Foto gentileza)