Los seis detenidos acusados de integrar una secta denominada "Abba Krishna", entre ellos su presunto líder, tras una serie de allanamientos en La Matanza y Merlo, durante los cuales se secuestró dinero, armamentos y trajes bacteriológicos, en una investigación que se inició por los delitos de abuso sexual y trata de personas, se negaron a declarar y fueron enviados a un penal federal mientras dure la investigación.
Además, los investigadores buscaban a dos mujeres como sospechosas de haber formado parte de la secta y que estarían dedicadas a captar a las víctimas a las que llevaban al templo para entregarlas al sometimiento sexual y a la explotación personal. Según las fuentes, el líder de la secta fue identificado como Aldo F., de 70 años, que se ganaba la voluntad de distintas personas para "poder someterlas a sus designios con una eminente connotación sexual" con la cobertura de supuestas enseñanzas espirituales.
También el acusado declaró ante la Justicia que "las armas encontradas en los allanamientos eran todas de propiedad de la organización y que las tenían porque se preparaba para la llegada del fin del mundo".
"Estamos preparados para la llegada del fin del mundo", eso dijo en declaración indagatoria el pai.
(EN)