Sabado 20de Abril de 2024CORRIENTES18°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$850,0

Dolar Venta:$890,0

Sabado 20de Abril de 2024CORRIENTES18°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$850,0

Dolar Venta:$890,0

/Ellitoral.com.ar/ Especiales

El aparecido de los estudiantes

Por Enrique Eduardo Galiana

Moglia Ediciones

Del libro “Aparecidos, tesoros y leyendas”

Una importante propiedad ubicada en el casco histórico de Corrientes fue subdividida y vendida a distintos propietarios, cada cual llevó su fantasma.

En la parte oeste de esa propiedad se construyó un edificio de varios pisos y se mantuvo una parte antigua con algunas refacciones.

En las tardes y frecuentando varias personas el lugar, a veces se cruzaban con un señor de aspecto solemne, muy formal, de traje azul oscuro y moño al cuello, que saludaba gentilmente y se iba al fondo del edificio hacia el sur, nadie advertía que este señor nunca volvía.

Una de las secretarias comenzó a observar con detalle a una persona que no era del grupo de estudiantes de la casa, lo siguió preguntándole a quién buscaba y qué quería, sin que tuviera ninguna respuesta y cuál fue su asombro que llegado al muro, desapareció dentro de él. Espantada corrió a contarle a sus compañeros de trabajo, algunos se rieron, otros ni siquiera la escucharon y hubo alguien que la recriminó advirtiéndole que no tome pastillas o cosa similar. La mujer continuó observando al hombre, quien a su paso ahora agachaba la cabeza en gesto de saludo. 

Terminó renunciando.

El recriminador y su amigo, este último traía documentos de otro lugar, se reían del asunto.

 Un buen día en el escritorio se sirvieron pocillos con café, extendiendo su conversación sobre el presunto fantasma; notaron una presencia extraña, el hombre con el moño añejo estaba parado en la puerta de la oficina de quien manifestara no creer en esas cosas. Azorados los incrédulos ven que la figura se les acerca y cambia de lugar los pocillos, por si fuera poco a uno de ellos lo vuelca.

El crítico incrédulo nunca más se quedó después del atardecer, el mensajero nunca volvió al edificio, prefirió que lo rebajen de categoría con tal de no volver a encontrarse con el señor de traje azul.

Pasado el tiempo el constructor del edificio manifestó que un túnel pasa por debajo de la propiedad, que lo cerró con una pared de 15 cm y que cuando estaban alumbrando ese lugar un hombre de traje azul y moño los invitó a pasar.

¿Te gustó la nota?

Ocurrió un error