Apipé: la patria chica que espera...

Por Rubén Darío Rodríguez y Claudia Carolina Romero Escobar*

Especial para El Litoral

Estamos caminando hacia un nuevo 25 de mayo. Hablaremos de gesta patriótica en cada una de las escuelas. ¡Todos llevaremos orgullosos la escarapela en el pecho —del lado del corazón—, obviamente! Así nos lo enseñaron desde chicos...

Los colores de nuestra bandera cubren de punta a punta nuestra Nación y se nos llena de orgullo el pecho cuando se trata de enaltecer a nuestros hombres y mujeres de mayo de 1810. 

Desde el reparto de cintas celestes y blancas en la plaza, frente al Cabildo, todo fue muy frenético, emocionante y la noticia del nacimiento de nuestra Nación, recorrió las tierras del Río de la Plata de extremo a extremo. 

Llegó primero a algunos lugares y, naturalmente, con cierta demora a otras latitudes de nuestra rica geografía...

Aquí, en esta isla extrema del mapa argentino, también se respiran aires de mayo, ¡por supuesto! Una hermosa y amplia bandera vuela al ritmo de la brisa y de los vientos del inmenso Paraná, en la orilla, frente a la represa...

¡Nuestros niños, nuestras casas y escuelas se visten de gala para el 25 de mayo! ¡Claro que sí! Los guardapolvos, después de casi dos años guardados por la pandemia, ¡llenarán los salones de actos de un color blanco puro y fuerte! 

¡Docentes, familias y estudiantes unirán sus voces a los acordes de nuestro himno nacional argentino y las poesías se harán sentir en cada rincón de nuestra tierra! 

¡Sí, señores! Llega el 25 de mayo y lo celebraremos... aunque a este nuestro paraíso, aún desconocido para muchos, las carretas y diligencias no pudieron llegar del todo a tiempo con las noticias de aquel glorioso mayo de 1810. 

Después de 212 años, y aún con nuestra enseña patria flameando a orillas de nuestro Paraná, debemos lidiar con una soberanía cercenada, a medias, confusa y manchada por límites irrisorios que alguna vez se corrieron de manera deliberada, ¡despojándonos de un pedazo hermoso de patria! Apipé Grande es argentina. ¡Tiene bandera y es celeste y blanca! Y desde aquí, donde también será 25 de mayo, ¡seguimos esperando las diligencias y carretas de aquel glorioso mayo! 

* Los autores son profesores de Educación Primaria de la isla Apipé Grande.