Con un acto en la Costanera Sur y un desfile institucional, el Gobierno provincial celebró el 40º aniversario del Servicio Penitenciario de Corrientes, una fuerza que -según destacaron las autoridades- vive un “cambio trascendental” en materia de infraestructura, formación y reinserción social.
El vicegobernador Pedro Braillard Poccard encabezó la ceremonia junto al ministro de Seguridad, Alfredo Vallejos, y el jefe del Servicio Penitenciario Provincial, inspector general Guillermo Sotelo, ante la presencia de funcionarios, fuerzas de seguridad y personal activo y retirado.
"De una estructura amortizada a una institución moderna”
En su discurso, Braillard Poccard resaltó los avances logrados en los últimos años en materia edilicia y de gestión:
“Pasamos de una institución que estaba más que amortizada a una de las unidades más modernas del país. Los correntinos debemos sentirnos orgullosos”, afirmó.
El vicegobernador subrayó que las obras recientes garantizan que las cárceles sean “sanas y limpias”, cumpliendo con el mandato constitucional de ser espacios de seguridad y no de castigo.
También destacó la reconversión de la antigua Unidad Penal N°1, actualmente en proceso de transformación en un polo cultural, turístico y tecnológico:
“Es un testimonio de cómo Corrientes ha avanzado en esta área tan delicada”, remarcó.
Reconocimiento al personal y llamado a la vocación de servicio
Dirigiéndose a los jóvenes penitenciarios, Braillard Poccard destacó la importancia de la función que cumplen:
“Han elegido una de las profesiones más trascendentes del Estado. Mantener la convivencia y el orden es un desafío diario, pero también lo es acompañar a quienes deben reinsertarse en la sociedad”.
Finalmente, transmitió el saludo del gobernador Gustavo Valdés y llamó a continuar trabajando “con el mismo empeño y compromiso hacia la comunidad correntina”.
Vallejos: “Una de las fuerzas más modernas del interior del país”
Por su parte, el ministro de Seguridad, Alfredo Vallejos, repasó los hitos históricos del servicio y destacó su evolución institucional.
Señaló el traslado de la antigua Unidad Penal N°1 como “un punto de inflexión”, que dio paso a una infraestructura acorde a los estándares actuales.
“Este logro refleja el sacrificio diario del personal y el acompañamiento de la sociedad”, aseguró.
El funcionario también advirtió sobre los nuevos desafíos del sistema de seguridad pública, como el narcotráfico y la pérdida de valores sociales:
“El Servicio Penitenciario no es ajeno a estos desafíos. Sus miembros son un pilar clave en la lucha contra estas problemáticas”, expresó.
Sotelo: “Cuarenta años de historia y compromiso con la reinserción”
El jefe del Servicio Penitenciario, Guillermo Sotelo, valoró las cuatro décadas de trayectoria institucional y el trabajo del personal en su búsqueda constante de profesionalización.
“Hoy celebramos no solo una fecha, sino el esfuerzo de miles de hombres y mujeres que consolidaron una institución esencial para la convivencia y la justicia”, expresó.
Sotelo destacó que el sistema penitenciario provincial evolucionó hacia un modelo más humano y orientado a la reinserción, con mejoras en infraestructura, formación y programas de educación y trabajo para personas privadas de libertad.
Finalmente, reafirmó el compromiso del Servicio Penitenciario con los derechos humanos, la ética y la legalidad, y agradeció el apoyo del Gobierno provincial para seguir fortaleciendo la institución.
Un cierre con desfile y reconocimiento
La jornada culminó con un desfile en el que participaron las distintas divisiones del Servicio Penitenciario, junto a fuerzas armadas y de seguridad.
Estuvieron presentes autoridades de los tres poderes del Estado, representantes del Comité contra la Tortura, funcionarios provinciales y municipales, y personal activo y retirado de la fuerza.