La División Policial Rural e Islas y Ambiente Rural (Priar) avanza la investigación del caso del guacamayo rojo —un ejemplar clave del proyecto de rewilding en Corrientes— que fue hallado herido y murió poco después.
Según el informe al que accedió El Litoral, la alarma se encendió cuando personal de la Fundación Rewilding Argentina detectó a través del GPS del ave que esta había dejado de moverse en un determinado momento.
Al llegar al lugar, una vecina detalló que su marido, en una recorrida a caballo buscando a sus vacas, había encontrado al ave en el suelo, en horas de la siesta, al lado del camino rural a las afueras de Concepción.
El equipo veterinario que atendió al guacamayo determinó que la causa del trauma fue una fractura carpometacarpina derecha expuesta, asociada a un traumatismo de alta energía. El examen descartó el ataque de otro animal, lo que apuntó a un origen externo y violento.
Testigos vieron jóvenes con armas en la zona
El personal del Priar realizó entrevistas que arrojaron un testimonio clave. Una testigo informó que su hija había visto el pasado lunes 29 de septiembre, en horas de la siesta, a un grupo de chicos de entre 13 y 17 años recorriendo la zona en moto.
El dato crucial es que estos jóvenes estaban portando gomeras y un aire comprimido. El reporte de otros pobladores de la zona reforzó la presencia de este grupo con las armas en el día y horario en que el guacamayo fue hallado herido.
La Policía y el equipo de investigación presumen ahora que el ave fue alcanzada con un proyectil de aire comprimido mientras se encontraba en vuelo, lo que causó la fractura fatal y su posterior muerte. La investigación busca identificar a los presuntos autores del ataque.