En octubre, la faena de vacunos en la Argentina fue de 1,2 millones, 2% más que en septiembre y 6% menos en un año, con las mismas variaciones para la faena promedio diaria.
El porcentaje de hembras fue de 47,7%, sólo con algunos decimales de diferencia con el registro de los anteriores 15 meses. Dentro de esa estabilidad hay una muy suave tendencia declinante.
En la comparación interanual, el envío de vacas, vaquillonas y novillitos a frigorífico cayó igual que el total. Sólo los novillos mostraron una reducción mayor, con 11%. La faena de los primeros diez meses, con 10,2 millones resulta 1% inferior en forma interanual. Y la de los últimos 12 meses, que totaliza 13,8 millones es igual al período comparable previo.
Panorama de mayor alcance
A partir de septiembre de 2024 se produjo una inflexión en la curva de faena de 12 meses móviles que nos hizo pensar que se terminaba la fase de reducción y comenzaba, como muchas veces en el pasado, una fase que iría achicando las disminuciones para ir convirtiéndose en una de mayor faena.
Sin embargo, entre julio y agosto se agotó este movimiento y parece volver a encaminarse a menores envíos a sacrificio. Este movimiento es atípico porque estas fases suelen durar más que los 12 meses de esta oportunidad. Duran más y llegan a extremos mayores.