¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

PUBLICIDAD

Pequeños productores encuentran una alternativa válida en el tártago

Por El Litoral

Viernes, 19 de diciembre de 2008 a las 22:00
Los productores correntinos colmaron las expectativas de los impulsores del proyecto tártago.
(((((EL DATO))))): La siembra de tártago se desarrolla habitualmente entre octubre y diciembre, mientras que la cosecha se da seis meses después de sembrado el campo.
(((((LOS NUMEROS))))): 3.000 kilos por hectárea es el rendimiento promedio por hectárea que tiene el tártago.


La producción de tártago se impulsa como una alternativa para pequeños y medianos productores de Corrientes, mediante un convenio con una empresa de capitales extranjeros que tiene por objetivo final la instalación de una planta extractora de aceite. En los últimos días finalizó la siembra de las plantas y se totalizaron alrededor de 2.700 hectáreas en todo el territorio provincial, considerado un éxito para los referentes de la iniciativa. A fines de febrero comenzarían las primeras cosechas, y se estima que el rendimiento mínimo será de unas tres toneladas por hectárea.
A través de convenios con asociaciones de pequeños productores y cooperativas de todo el interior de Corrientes, Chaco y Misiones, una empresa de capitales suizos impulsa la introducción del tártago como actividad agrícola. Para este primer año, alrededor de 300 agricultores correntinos sembraron el producto del cual se obtiene aceite de ricino, que es utilizado tradicionalmente para la actividad industrial, aunque en los últimos años se impulsó su utilización para la fabricación de biocombustibles.
El coordinador del proyecto para Corrientes, Manuel Tutuy, explicó a El Litoral que las explotaciones de tártago en la provincia se emplazan en dos cuencas: la Norte, que comprende los departamentos emplazados desde Ituzaingó hasta San Roque, por toda la costa del Paraná y tomando como límite la Ruta Nacional Nº 118; y la Sur, que comprende los distritos australes de Corrientes, como lo son Goya, Lavalle, Esquina y Sauce. En estas regiones, los técnicos de la empresa GAR Argentina (Global Agricultural Resources, en Suiza) firmaron convenios con asociaciones y cooperativas de pequeños productores para que se dediquen a la actividad. Mediante el trato, los minifundistas recibieron capacitaron e insumos necesarios para sembrar sus campos (semillas, gasoil, entre otros), con el compromiso de venderle su producción a la empresa que lleva adelante el proyecto, a un precio establecido de 120 dólares.
El profesional comentó que si bien en octubre, con el inicio de la siembra, se registraron importantes lluvias que beneficiaron la germinación del cultivo, en los dos últimos meses -noviembre y diciembre- las precipitaciones no fueron contundentes. Sin embargo, estimó que “se trata de una planta muy resistente a la falta de agua, y creo que con alguna lluvia que pueda aparecer en los próximos días, puede ayudar a germinar las plantas de manera correcta”.
Dentro de las propiedades que tiene el tártago, Tutuy enumeró el manejo orgánico que tiene el cultivo, lo que hace innecesaria la utilización de agroquímicos por la inexistencia de plagas. Además, su producción requiere poca mano de obra y puede ser mantenida por el núcleo familiar. Según explicó el profesional, el tártago también enriquece los suelos y elimina algunos parásitos que afectan a otros cultivos que pueden producirse a la par de éste, como sandía, batatas, maíz o poroto, por nombrar algunos.

Industrias
“La idea es poder implantar una cuenca de tártago en toda la provincia, y así planificar la radicación de plantas extractoras de aceite de ricino”, dijo Manuel Tutuy a El Litoral. No obstante, el profesional estimó que para la industrialización es necesario contar con mucha más materia prima de la que se sembró en este primer año del proyecto en Corrientes. “Queremos llegar a sembrar entre 7.000 y 8.000 hectáreas. A partir de ahí podemos planificar la instalación de una planta”, comentó Tutuy.

Últimas noticias

PUBLICIDAD