Talleres, de Córdoba, se clasificó anoche para jugar con Boca Juniors la final de la Copa Argentina 2021 al superar a Godoy Cruz por 1 a 0, en el estadio Juan Gilberto Funes, de la localidad de La Punta, San Luis.
El ganador de ese partido decisivo, a jugarse el miércoles 8 próximo, en el estadio Único-Madre de Ciudades, de Santiago del Estero, clasificará directo a la zona de grupos de la Copa Libertadores 2022 y, a la vez, al que pierda le permitirá entrar en el repechaje de la misma competencia porque liberará un cupo en la Tabla Anual 2021.
El extremo derecho colombiano Diego Valoyes, de tiro penal, a los 12 minutos del segundo tiempo, le dio la victoria al equipo cordobés.
Pese al nerviosismo que puede generar una semifinal, Talleres y Godoy Cruz no desentonaron. Aun sin mostrar su mejor versión, dejaron ver algo de las propuestas que los transformó en equipos protagonistas en el último tiempo. Buscaron asumir el rol protagónico y tuvieron aproximaciones para abrir el marcador.
Se vio un mejor inicio del equipo cordobés, pero su adversario ganó metros con el paso de los minutos y finalizó la etapa inicial más cerca de abrir el marcador.
El primer tiempo tuvo intensidad creciente. Avisó primero el elenco mendocino con un disparo de Martín Ojeda que desvió Guido Herrera, más tarde tuvo dos situaciones la “T” con un cabezazo alto de Diego Valoyes y un tiro libre de Michael Santos que tapó Juan Espínola, y sobre el cierre hubo chances cruzadas: el arquero del Tomba le sacó un cabezazo a Nahuel Tenaglia y Herrera un disparo a Ojeda, y tras el rebote definió mal Damián Pérez.
La lluvia y el viento fueron factores que influenciaron la merma en el rendimiento para ambos en el complemento. Esto, sumado a la tensión que generó el paso de los minutos, atentó contra el desarrollo del juego.
Parecía estar todo dado para que lo ganara el equipo que abriera el resultado y así fue. Santos quedó mano a mano con Espínola y Bruno Leyes, el arquero torpemente empujó al defensor, que en el piso tocó el balón con el brazo. Ariel Penel convalidó el penal y Valoyes lo cambió por gol con un disparo cruzado a la derecha.
Poca resistencia ofreció después el Bodeguero; más allá de cierta pérdida de control del lado cordobés se arrimó solamente con un disparo de Ojeda que ahogó Herrera.
El equipo ganador ajustó líneas y dejó pasar los minutos con mucho oficio ante un rival al que le faltaron ideas para inquietar el arco de enfrente.
Talleres aprovechó su momento y frente a una multitud ganó el partido que más necesitaba. En siete días, buscará el título frente a Boca en Santiago del Estero.
Los abrazos interminables de los jugadores y la emoción entremezclada con sonrisas y llantos de los hinchas cordobeses en las tribunas, le ofrecieron un marco especial a ese pase de la T a la primera final de un torneo nacional, después de haber ganado la desaparecida Copa Conmebol de 1998. a nivel internacional.