Alberto Fernández junto a Emmanuel Macron y Gustavo Petro participaron del reinicio de las conversaciones entre los delegados del régimen de Venezuela y la oposición política, tras la suspensión abrupta de las negociaciones en México por la extradición de Alex Saab a Estados Unidos, un empresario colombiano acusado de actuar como testaferro de Nicolás Maduro.
Las negociaciones en Ciudad de México, apoyadas por Noruega, tenían como finalidad garantizar la transparencia de las elecciones de Venezuela en 2024. Los presidentes de Argentina, Francia y Colombia tienen intenciones de respaldar este proceso institucional y por eso decidieron participar del cónclave que se realiza en el Palacio Brongniart.
Antes de llegar a este importante reunión en París, la diplomacia global actuó con reserva para lograr que Maduro regresara a la mesa de negociaciones. Representantes de Joseph Biden y de Macron, y la iniciativa personal de Alberto Fernández y Petro lograron que las conversaciones se retomen en la capital de Francia.
El presidente argentino y su colega colombiano dialogaron directamente con Maduro, mientras que Macron y John Kerry —representante de Biden para el Medio Ambiente— aceptaron posar en público con el líder venezolano frente a los fotógrafos de la prensa mundial.