El arroyo Santo Domingo es un cauce que atraviesa la zona norte de la ciudad de Corrientes hacia el río Paraná. Debido a las dificultades para acceder al hábitat urbano cualificado, sobre sus bordes se dieron procesos históricos de ocupación y autoconstrucción, derivados del crecimiento de los barrios del entorno.
En el proyecto de la Unne caracterizaron al área por la precariedad habitacional y sus implicancias jurídicas en torno a los derechos de propiedad. Concentra, aclararon los investigadores, un conjunto de graves problemáticas ambientales que vulneran derechos individuales y colectivos.
También señalaron que las propuestas de mejoras de los vecinos “han sido permanentemente desoídas”.
Desde distintas profesiones, tienen el propósitos visibilizar desde el inicio la complejidad del área, previo al producto final “que deberá servir para peticionar ante los organismos que correspondan las actuaciones prioritarias surgidas del diagnóstico participativo e integral”.
(IB)