Las fuerzas ucranianas lanzaron una contraofensiva cerca de la ciudad de Izium, en el este de Ucrania, controlada por Rusia, dijo el sábado un gobernador regional, en lo que podría resultar un serio revés para los planes de Moscú de capturar la región.
Las fuerzas rusas han centrado gran parte de su potencia de fuego en Donbas en una “segunda fase" de su invasión que se anunció el 19 de abril, después de que no lograron llegar a la capital, Kiev, desde el norte en las primeras semanas de la guerra.
Pero Ucrania ha estado recuperando territorio en el noreste, alejando a los rusos de Kharkiv, la segunda ciudad ucraniana más grande. Mantener la presión sobre Izium y las líneas de suministro rusas hará que sea más difícil para Moscú rodear a las tropas ucranianas endurecidas por la batalla en el frente oriental en el Donbas.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, también dijo que se estaban llevando a cabo conversaciones complejas para encontrar una manera de evacuar a un gran número de soldados heridos de una acería sitiada en el puerto de Mariupol a cambio de la liberación de los prisioneros de guerra rusos.
Mariupol, que ha sufrido los combates más duros en casi tres meses de guerra, ahora está en manos rusas, pero cientos de combatientes ucranianos aún resisten en la acería de Azovstal a pesar de semanas de intensos bombardeos rusos.
Los analistas militares occidentales dicen que el presidente ruso, Vladimir Putin, y sus generales no pudieron anticipar una resistencia ucraniana tan feroz cuando lanzaron la invasión el 24 de febrero.
Además de perder una gran cantidad de hombres y mucho equipo militar, Rusia se ha visto afectada por sanciones económicas.
El Grupo de las Siete principales economías occidentales se comprometió en un comunicado el sábado a “aumentar aún más la presión económica y política sobre Rusia” y suministrar más armas a Ucrania.
(GGC)