Primeras fotos de Ovnis en la Argentina

Por Francisco Villagrán

villagranmail@gmail.com

Especial para El Litoral

En toda la década del 60 se produjeron en el país una serie de observaciones y con el agregado de la toma de fotografías de estos objetos como un firme testimonio de gran interés para los investigadores del tema Ovni. Antes las primeras imágenes eran consideradas muy valiosas para realizar un estudio técnico de las mismas y considerar que en algunos casos podían ser trucadas. Pero actualmente, con la nueva tecnología que puede ser utilizada por cualquier ciudadano, prácticamente es muy difícil que una foto pueda ser trucada. Esto no se descarta, pero también es fácil detectar los posibles retoques que se le hacen a una foto. Durante el verano de 1965 no pasó un día sin que los diarios, revistas, televisión y radios no dejaran de referirse a los numerosos avistamientos ocurridos en todas partes del mundo y en especial en nuestro país.

Rescatemos, por ejemplo, el siguiente informe de la agencia UPI: fotografiaron dos platos voladores en Argentina. Un Objeto Volador No  Identificado fue visto sobre el Río de la Plata, la ancha vía de agua que separa las costas de Argentina y Uruguay. Seis personas que caminaban por una desierta playa  próxima a la ciudad de Colonia, Uruguay, vieron el objeto cerca de las 10 de la mañana. El hecho se produjo  15 horas después de que varios Objetos Voladores No Identificados fueran vistos sobre la ciudad de Buenos Aires. Las observaciones arrojaron mucho interés sobre los “platillos voladores”, que según se informó, fueron advertidos sobre varias partes del extremo austral de América del Sur. 

Una de las seis personas que vieron  el objeto en Uruguay fue José Luis Alvarez, de 20 años, quien informó a la policía que el objeto tenía forma de cigarro, era de color rojizo y estaba suspendido sobre el río a unos 10 metros, no muy lejos de la playa. Agregó que se desplazó hacia arriba cuando él comenzó a correr hacia el lugar, y que dejó tras de sí un rastro de vapor blanco similar al que despiden los motores a reacción. Los otros acompañantes de Alvarez, dos de los cuales eran adultos, confirmaron sus dichos. También al día siguiente, poco después de la puesta del sol, varias personas informaron haber visto varios objetos volantes no identificados sobre Buenos Aires. Algunos de ellos fueron fotografiados y se los describió con forma de cigarro, se dijo que emitían luces de colores que variaban en los tonos rojizos y azulados. Todos coincidieron en que la luz que despedían los objetos era muy intensa. El diario El Mundo repitió la descripción de uno de los observadores, a quien no identifica, que dijo que el objeto que divisó era “tres o cuatro veces más brillante que las estrellas más luminosas y que tenía un color rojizo. Todos los observadores de los extraños cuerpos que se vieron sobre Buenos Aires advirtieron que los objetos parecían estar estacionados durante unos 15 minutos antes de moverse para desaparecer en dirección noroeste. Durante el período en que los objetos fueron vistos sobre Buenos Aires, la transmisión de uno de los canales de televisión quedó interrumpida según dijeron los técnicos, por “interferencia atmosférica”. No obstante, el observatorio astronómico oficial de San Miguel informó que durante ese lapso no se había registrado perturbación atmosférica alguna. Es decir que, a la luz de los acontecimientos, hay una evidente contradicción entre los técnicos del canal de televisión y el informe del observatorio oficial de San Miguel.

Presencia oficial

La Fuerza Aérea envió aviones para investigar la presencia de los objetos desconocidos, pero los pilotos informaron que durante su misión no habían observado nada anormal. Los Ovnis fueron también vistos a las 10 de la noche por varios residentes de la ciudad de Bahía Blanca, 700 kilómetros al sur de Buenos Aires, sobre el Océano Atlántico. Anteriormente se informó que otros extraños objetos volantes habían sido divisados sobre la zona antártica por observatorios meteorológicos chilenos, argentinos y británicos.

En ningún caso se pudo constatar la veracidad de las afirmaciones de varios vecinos de la capital y varias localidades aledañas, especialmente en la zona oeste, que afirmaron haber visto estos aparatos. Las máquinas utilizadas fueron aviones Gloster Meteor y Morane Saulnier de color plateado, todo este despliegue no hizo más que aumentar la expectativa de los vecinos de la zona que aseguraron haber visto a las 18 un gran plato volador. Se aclaró posteriormente por parte de la Fuerza Aérea Argentina que dichos vuelos no se dispusieron por la presunta presencia de objetos extraños en el cielo. Esta oleada fue muy interesante ya que ese día y los posteriores, un gran número de Objetos Voladores No Identificados fueron vistos y fotografiados. Sin duda que esa semana en toda la República Argentina se vieron, se fotografiaron y se detectaron en todos los radares militares, pues como lo informó la agencia de noticias UPI al mundo, la noche del 17 de julio de 1965, salieron en misión de intercepción aviones caza bombarderos del tipo Gloster Meteor de fabricación británica y también del tipo Morane Saulnier, los cuales realizaron la “caza” de los platos voladores, o por lo menos, lo intentaron.

Otro de los elementos que llamó la atención es que la misma agencia informativa dijo que “durante el período que los objetos fueron vistos sobre Buenos Aires, la transmisión de uno de los canales de televisión quedó interrumpida por una interferencia atmosférica ¿Qué objeto volador puede causar una interferencia de ese tamaño sobre cualquier ciudad del mundo? Las fotografías que se tomaron en todas estas observaciones fueron estudiadas profundamente por especialistas en la materia y las consideraron auténticas. Los investigadores de la actualidad revisaron las fotos tomadas hace muchos años en blanco y negro y afirmaron que estaban bien hechas. Sobre todo porque fueron tomadas y estudiadas con modernos medios tecnológicos capaces de determinar sin error si son o no trucadas. Posteriormente hubo otros casos, uno de los cuales ocurrió cuando un helicóptero de la Fuerza Aérea estuvo involucrado en un incidente en pleno día, cuando fue seguido por cuatro Ovnis hasta muy cerca y otro un suceso involucró un gran disco metalizado que fue fotografiado por un avión de la Fuerza Aérea Argentina desde muy cerca y cuando volaba a una velocidad media. Estas fotos son un valioso testimonio de la presencia de estos extraños aparatos que son vistos en todos los cielos del mundo, sobre todo porque fueron fotografiados por una fuerza de seguridad en pleno vuelo.