Boca Juniors resolvió en dos minutos en el segundo tiempo un partido que Tigre le había complicado en la primera etapa del encuentro que protagonizaron anoche en la Bombonera y los Xeneizes ganaron 5 a 3, por la tercera fecha del campeonato de la Liga Profesional.
En esta reedición de la pasada final de la Copa de la Liga Profesional que habían ganado los boquenses por 3-0 hubo una primera mitad que parecía favorecer al dueño de casa cuando a los 10 minutos Darío Benedetto los puso en ventaja luego de una buena acción entre Aaron Molinas (se iría a Defensa y Justicia) y Sebastián Villa, que terminó asistiendo con un centro para que el goleador anotara de cabeza.
Pero a partir de esta conquista los “xeneizes” se fueron desinflando paulatinamente, en la medida que Tigre le fue encontrando la vuelta al partido a partir de un funcionamiento aceitado que sobre la media hora ya lo había constituido en dominador.
Y el empate fue una consecuencia de ello, aunque la acción por un descuido de la defensa auriazul cuando Sebastián Prieto sacó rápido un lateral para Diego Zabala y su remate sesgado se desvió en la cola de Jorge Figal y descolocó al arquero Agustín Rossi.
Quedaban poco más de 10 minutos del primer tiempo y en ese lapso Tigre terminó de justificar con su superioridad conceptual esa paridad a la que se había hecho largamente acreedor. Pero en el arranque del segundo tiempo quedó claro que Boca tiene su poder de fuego por los costados con el chico Zeballos en estado creciente por derecha y el colombiano Villa por izquierda.
Así, a los 9 minutos, el Changuito Zeballos ingresó al área y definió abajo, entre las piernas del arquero Gonzalo Marinelli, y a los 11 apareció Villa por izquierda y asistió a Frank Fabra, que le pasó por atrás y anotó con un zurdazo cruzado que terminó desviándose en Demartini.
Parecía todo prematuramente resuelto para los locales, pero apenas superados los 20 minutos apareció uno de los cinco ex Boca Juniors que puso esta noche el director técnico Diego Martínez, que también supo trabajar en las inferiores “xeneizes”, el delantero Mateo Retegui, para lograr el descuento luego de tres cabezazos en el área boquense.
Pero todo lo que Boca desacredita atrás lo acredita adelante, y cuando la victoria estaba en peligro, nuevamente en dos minutos lo terminó definiendo con dos goleadores repetidos como Zeballos a los 29 y Benedetto a los 31, este aprovechando un error de Demartini, que presionado en la salida, pifió el pase queriendo jugar hacia atrás con su arquero Marinelli.
Todo fue entonces celebración en las colmadas graderías boquenses, algo que se iba a prolongar una vez terminado el encuentro, cuando se realizaron los demorados festejos por la obtención de la pasada Copa de la Liga justamente ante el rival de esta noche, y conjuntamente con ello el club recibió el trofeo correspondiente a ese título.
Pero en ese cuarto de hora final al que le agregaron 6 minutos de descuento siguieron pasando cosas, como por ejemplo que otra vez Figal tuvo una acción desafortunada al cometerle penal a Retegui, convalidado por el árbitro Jorge Baliño a instancias del VAR.
Y fue el propio Retegui el encargado de ajusticiar nuevamente a Rossi con un disparo al medio del arco que significó que por primera vez el guardavallas “xeneize” recibiera tres goles en un partido en la primera división auriazul.
Así entonces, Boca trepó a la tercera posición del campeonato con seis unidades y Tigre permanece en la decimotercera ubicación con cuatro puntos.