El temporal que arrasó en la ciudad de Corrientes el domingo pasado, dejó como resultado grandes socavones en distintos sectores de la ciudad. El más complicado se encuentra por calle Pringles en el barrio Cichero y pone en riesgo a las viviendas frentistas. Por Río Chico y Canal 4, el suelo cedió en dos sectores sobre la vereda, en el barrio San Roque Este se hundió el suelo unos 3 metros y otro similar por Frondizi y Loreto.
Las intensas lluvias producidas alcanzaron un total de 201,9 milímetros, según los datos del Instituto Correntino del Agua y del Ambiente (Icaa) y dejaron una gran cantidad de viviendas cubiertas de agua, 996 evacuados en distintos refugios y cráteres, algunos de hasta 3 metros de profundidad.
El primero de ellos se produjo incluso antes de que ocurriera el último temporal, el martes 27 de febrero. Cuando una lluvia que acumuló 70 milímetros, generó que el ducto de cloaca que pasa por debajo de la calle Pringles en el acceso al barrio Cichero colapse por la gran cantidad de agua.
En menos de una semana, para el domingo 3 de marzo, la lluvia triplicó la cantidad en cuestión de horas, esto produjo que en la misma calle y a unos pocos metros de distancia se produjera un segundo cráter aún más grande.
Como solución a estos cráteres de grandes dimensiones fuentes oficiales de la municipalidad señalaron a El Litoral que: “en el de calle Pringles, vamos a tener que hacer el pluvial hasta el río que se encuentra a unos 50 metros”.
En el barrio San Roque Oeste, la tierra descendió y quedó un gran bache de 3 metros. Este cráter se encuentra por Mocoretá y avenida Maipú, alrededor solo colocaron una cinta para advertir a los transeúntes, sin embargo, puede resultar peligroso para personas que no conozcan el lugar.
Vecinos del barrio alertaron a El Litoral que: “El bache se encuentra bien frente a la llamada Quinta de los Médicos. Tiene más de 3 metros y está abierto, un peligro tremendo para niños, y también animales”.
En otro sector de la ciudad, por la calle Río Chico y Canal 4, el suelo se hundió por completo en dos sectores sobre la vereda. Se trata de un encauzamiento de un arroyo natural que desemboca en el río Paraná.
Mientras que por Frondizi y Loreto, se produjo el cuarto bache de gran profundidad. En la tarde de ayer el municipio comenzó a reparar el mismo, ante la gran circulación de vehículos.
(VT)