Viernes 19de Abril de 2024CORRIENTES21°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$850,0

Dolar Venta:$890,0

Viernes 19de Abril de 2024CORRIENTES21°Pronóstico Extendido

Dolar Compra:$850,0

Dolar Venta:$890,0

/Ellitoral.com.ar/ Campo

Visiones diferentes de la exportación

Si se toma el ejemplo de la nalga, se observa que por este corte se pueden obtener en el exterior unos 5.500 dólares por tonelada, que a través de un tipo de cambio de 4,80 pesos, menos retenciones del 13 por ciento, da un precio bruto de unos 23 pesos por kilo. Pero a este valor hay que descontarle todavía entre tres y cuatro por ciento de gastos diversos (caja, etiquetas, polietileno, frío) y la retención adicional que en la práctica significa la “barata”, lo cual obliga a los exportadores a vender a pérdida al mercado interno una tonelada de carne por cada 3,5 toneladas que se exportan; todo esto lleva el ingreso neto a unos 20,50 pesos por kilo de nalga. Esta cifra es sin tener en cuenta las mayores exigencias que tiene la exportación en materia de dressing en relación al mercado interno.
Ese mismo corte, para el mercado local mayorista, se paga por lo menos 25 pesos por kilo, con una firme demanda. Salvo los mercados donde los cortes argentinos gozan de un sobreprecio en relación a nuestros competidores (enfriado Hilton, delantero a Israel, picanha a Brasil), en el resto de los destinos los números no cierran: con este tipo de cambio, es más conveniente vender al mercado local, que está muy alto en términos de dólares, y que en general, reconoce en los cortes mayoristas el valor que se paga por el novillo.
Discrepancia. En un reciente seminario, un representante de la industria frigorífica exportadora afirmó que la situación del sector tendía lentamente a mejorar: con un precio para el novillo estancado, una devaluación que se ha acelerado y algunos mercados que muestran signos de recuperación, las pérdidas tendían a achicarse. Otro industrial, que pidió la palabra, lo refutó indignado: aseguró que el atraso cambiario persiste y tiende a agravarse, que el valor de la hacienda, los salarios y energía que pagan los industriales (en dólares) quitan toda competitividad y que el mantenimiento de las retenciones y de “la barata” son señales de que el deseo actual del Gobierno que se exporte más carne vacuna no es más que parte del “relato”.

¿Te gustó la nota?

Ocurrió un error