Hoy en día, el móvil es el principal dispositivo que guía la vida digital de los argentinos. Gracias a su facilidad y comodidad de uso, se ha convertido en una herramienta indispensable para comunicarse, acceder a información, entretenerse a través de apps, hacer compras online y gestionar las finanzas personales en pocos clics.
Los datos lo confirman: la penetración del móvil supera el 70 % en el país y el consumo digital se inclina directamente hacia las pantallas pequeñas. Además, Argentina se posiciona como uno de los mercados más activos de Latinoamérica en el uso de tecnologías móviles, convirtiéndose en un referente en digitalización en los próximos años.
Los argentinos, siempre conectados
Los datos de la Cámara Argentina de Internet (CABASE) demuestran que más del 93 % de los argentinos son usuarios habituales de internet y el 88 % accede desde el celular. Esto se debe al despliegue de las redes 4G, que están prácticamente consolidadas en todo el país. Además, ya se están realizando pruebas con 5G, lo que en principio permitirá acelerar aún más la transformación digital.
Por otro lado, los servicios de banca móvil y las billeteras virtuales se han abierto paso en la vida diaria en el último año, facilitando los pagos y envío de dinero en tiempo real.
Más del 60% de las transferencias inmediatas en 2024 se realizaron a través de billeteras digitales, según el Banco Central argentino.
Esta tendencia también se refleja en otros sectores, como son los e-commerce y las plataformas de anuncios clasificados como Simple Escort Corrientes. En este caso, más del 80% del tráfico web procede de dispositivos móviles y el tiempo medio de interacción supera los dos minutos.
Así se consolida la revolución digital en el país
Nuestro país lidera en varios frentes, siendo los pagos digitales el más novedoso, pues Mercado Pago supera los 10 millones de usuarios activos mensuales y se consolida como la billetera más utilizada a nivel nacional. También la integración del 5G que se espera una expansión progresiva en los próximos años.
Asimismo, el consumo de entretenimiento digital se ha trasladado del desktop al móvil, liderando las redes sociales y plataformas de streaming. Además, la mensajería instantánea ha crecido exponencialmente desde la pandemia.
Finalmente, las compras en línea no dejan de crecer. De hecho, la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE) reportó en 2024 más de 500 millones de transacciones online, con un volumen superior a los 7.000 millones de dólares en ventas.
Estos son los retos que marcarán la digitalización en el país
Actualmente, hay 3 retos a nivel nacional que marcarán los siguientes pasos de la digitalización nacional.
En primer lugar, el cierre de la brecha digital entre las áreas urbanas y las rurales. Mientras las grandes ciudades ya disfrutan de 4G estable y pruebas de 5G, en provincias más alejadas aún hay problemas de cobertura y consumo costoso de datos móviles.
El segundo, el aterrizaje definitivo de la red 5G. No basta con desplegar antenas, sino que el desafío está en aprovechar su baja latencia para ofrecer servicios más punteros. Un avance que se vería reflejado en atención médica a distancia o logística de seguimiento en tiempo real.
Finalmente, integrar y consolidar la cultura mobile-first. Aunque hay comercios y plataformas de escort que ya lo integran, aún son muchas las empresas y medios digitales que deben pensar en sus productos para pantallas pequeñas. Algunas integraciones claves giran en torno a la carga rápida, los formatos verticales y los procesos de pago simplificados.
La digitalización argentina, en un momento decisivo
La revolución del smartphone avanza a gran velocidad y muestra un patrón específico en el país: los celulares son la llave de acceso a la vida digital. Con una base sólida de usuarios conectados en línea, un entorno consolidado de billeteras virtuales y un comercio electrónico en expansión, el país tiene las condiciones para convertirse en un referente mobile-first en Latinoamérica en los próximos años.
Sin embargo, el reto está en capitalizar la llegada del 5G, reducir la desigualdad en conectividad que hay entre provincias, y garantizar sistemas de pago que incluyan a toda la población. Si se consigue este equilibrio, el país será un referente en liderazgo digital para el resto de países.